Soledad …

A veces pasa que mi enemigo decide dejarme por un par de días, no sucede muy a menudo, pero, pasa.

Han pasado algunos días en que la soledad ha llegado a mi vida. Me siento bien en general, pero, sola. Puede ser cierto esto? Puede ser que mi «compañero» quién tanto daño me hace, produzca un vacío en mi vida que nada más lo pueda llenar? Los días pasan y hay un poco de tranquilidad en mi cabeza y en mi corazón, soy capaz de levantarme sin pensar en calorías, kilos, gramos, formas, reflejos y tantas otras cosas! Sin embargo no estoy en paz, me pregunto donde está? en que momento volverá? seré lo suficientemente fuerte para no dejar que vuelva?

Siento los aromas de la comida a la hora de cocinar y no me provocan el asco que siento normalmente, hoy no hay transpiración, ni mareos ni ataques de pánico. 60 gramos de Fluoxetina, 4 gr de Edronax están haciendo su trabajo y puedo estar medianamente «normal» Aunque realmente no se lo que esa palabra significa.

60 grs. de Fluoxetina, prozac o como quieran llamarlo, será demasiado? La verdad es que generalmente pienso que necesito el doble para poder estar por lo menos tranquila. Pero hoy no, hoy siento que están haciendo el efecto que necesito.

Al pasar cerca del espejo hoy, no me di vuelta a mirar, es increíble la libertad que siento cada vez que no lo hago? Hoy es como un día de primavera, claro que después que ya terminaron de florecer los árboles, flores, arbustos y etc, porque me da una alergia espantosa! En fin, un día pleno y hermoso de primavera aunque en realidad sigamos tapados de nieve.

 

El espejo

Qué cosa más aterradora existe en este mundo, a parte de engordar claro está, que un espejo? Para mi es lo peor, bueno sin contar cualquier tipo de material que sirva para reflejarme. Una vitrina, la pantalla del compu, un vidrio …etc.

Hace un tiempo destapé los espejos de mi casa, ya no tengo uno de cuerpo entero y tampoco uno en la habitación, así que pensé que sería un paso adelante destapar los demás. Después de todo no quiero que mis hijos crezcan con esta angustia ni estos miedos.

Pienso que aunque sea un paso adelante, son muchos para el lado. En realidad es una lucha contra mi «enemigo». Èl me obliga a mirarme y a remirarme cuando lo hago muy rápido y cada vez que paso por delante. Es como cuando ves un accidente, tu sabes que no tienes que mirar, pero de alguna manera algo te impulsa a hacerlo de todas maneras. El resultado es siempre el mismo, asco, odio hacia mi, ganas de cortar todo lo que sobra. Han habido ocasiones en que he podido mirarme en un espejo sin salir corriendo y me he preguntado, por qué? por qué no puedo respirar profundo y pensar «hay cosas más importantes que el cuerpo» por ejemplo, pero, es imposible! Después de unos segundos vuelvo al infierno, mi infierno! Por qué no puedo ver más allá de mi reflejo, por qué nunca ha sido suficiente lo que veo? Es que acaso me creo tan especial, que nada es suficiente porque todo lo puedo hacer mejor? No lo sé, no se que hace que mi enemigo piense por mi y domine toda la situación.

Después de una sesión de  terapia, hace mucho tiempo, volví a casa y me paré frente al espejo con una foto antigua mía, llegué a pensar que en esa foto me veía muy bien en realidad, que no había nada de malo en ella y ni siquiera me veía grande u ocupaba mucho espacio, luego miré mi reflejo y vi algo completamente distinto; una bestia enorme. Después de eso nunca volví a tratar.

Si quiero ser positiva, la terapia me sirvió de algo, ya que fui capaz de  pararme frente al espejo, solo que desde esa vez, me odié más que antes…

 

Se presentó nuevamente …

Todo estaba más o menos bien, hasta que una foto consiguió despertarlo. A veces pienso que duerme muy profundo, tanto que me deja respirar, me deja vivir! Pero, no es así, no dura mucho tiempo en ese descanso. Basta que alguien habla de Ana o de Mia para que comience a funcionar nuevamente.

Al principio los medicamentos ayudan y crees que todo está mucho mejor, hasta que se acostumbra a ellos y vuelve a encontrar una forma de estar presente.

Hoy por ejemplo, apareció y se quedó todo el día. Unas simples palabras  leídas al pasar, que obviamente no iban dirigidas a mi, causaron una angustia tan grande, que caí en un profundo vacío. Como explicar algo que ni yo se como describir?

Es como un interruptor que enciende o apaga algo y sin volverlo a tocar, no puedes cambiar la luz o la oscuridad. El problema es que muchas veces «la luz» no significa necesariamente algo bueno.

Como puedo explicar que una palabra, un gesto, algo mínimo puede hacerme odiar mi cuerpo hasta el punto de querer herirme, de querer desaparecer. Veinte años de «tratamientos» y aun así sigo odiando cada parte de mi ser. Todo lo que soy y lo que no fui.

«No le des importancia a esas cosas», «hay cosas más importantes en la vida», «da las gracias, tienes hijos sanos», como le explico al mundo que cuando el switch que existe en alguna parte de mi cabeza se activa, no hay nada que pueda hacer?